3 de septiembre de 2011

Por que los perros persiguen bicis


Vamos a tratar de explicar un poco la psicología canina relacionada con la territorialidad y la defensa de la manada, así como la relación entre perros.

Está aceptado que los perros (canis lupus familiaris) han evolucionado a partir del lobo (canis lupus lupus). Puedes ver la clasificación de la subfamilia canidae para ver exactamente a lo que me refiero. Los expertos, por tanto, se fijan mucho en el comportamiento del lobo en libertad para ver cómo se comportan los perros.

Las -mal llamadas- razas de perros han sido creadas por el hombre (ha seleccionado ejemplares) para acentuar determinados aspectos y obtener animales adaptados a una tarea específica.

Por ejemplo, un bichón maltés es un perro de menos de 5 Kg de peso. Se creó para cazar ratones en los barcos. El mastín español, un perro de 40 Kg, se creó para defender al ganado del lobo. El Galgo se creó para cazar liebres, conejos, perdices, etc. En definitiva, fue el hombre quien de manera artificial seleccionó unas crías y fue creando lo que llamamos razas para potenciar determinadas cualidades y eliminar (en gran parte) las restantes.

El concepto de utilidad del perro como animal simplemente de compañía (sin cazar, defender, matar ratas, etc) es algo relativamente reciente en la sociedad.

Entremos en el asunto en cuestión. Los perros, al nacer, tienen aprendida una serie de comportamientos (memoria genética). Por ejemplo, el "lenguaje perruno", entendiendo por tal los gestos de sumisión, de superioridad, la defensa de la manada y de su territorio, etc.

Otros comportamientos son aprendidos desde la siguiente perspectiva: "si hago algo y me reporta un beneficio, lo repito. Si no me reporta beneficio, o me perjudica, no lo repito".

Uno de los comportamientos que todo perro tiene aprendido de nacimiento es el de la defensa de su territorio y manada. Hay razas a las que este comportamiento se les ha acentuado como son los distintos tipos de perros pastores o mastines.

El territorio de un lobo en libertad (y por tanto el de un perro) se organiza de una manera concreta, en forma de anillos:

Hogar: situado en el centro de todo el territorio. Aquí solo acceden los lobos de mayor rango social de la manada. Ocupa una extensión muy reducida.
Dominio: situado en el primer anillo. Es donde pueden vivir los ejemplares con menos rango que los anteriores (y los de mayor rango si quieren). Ocupa una extensión mayor.
Territorio: situado en el segundo anillo. Pueden acceder todos los miembros de la manada. Es donde realizan su vida cotidiana. Juegos, caza, etc.
Tierra de nadie: separa los territorios de dos manadas adyacentes de lobos.

Si no hay superpoblación (manada muy grande) ni escasez de alimentos, los lobos no entrarán en el territorio de otra manada.

Pues bien, vamos a adaptar el concepto anterior a los perros que se tienen en el campo.

Hogar: puede ser la casa (cortijo, pazo, caserío, en fin, como se llame en caza zona) o bien las majadas (donde se guarda el ganado por la noche).
Dominio: las zonas relativamente cercanas a la casa o majada.
Territorio: toda la zona por donde llevan al ganado.

¿Cómo comunican los perros o los lobos a los demás las fronteras de su territorio? Mediante el marcaje del mismo a través de orina, heces, restregar las patas por el suelo, etc.

¿Cómo sabe el hombre donde comienza una y dónde termina otra?
Simplemente no lo sabe, necesitaría una nariz prodigiosa capaz de detectar los olores de las gotitas de orina dejadas varios días atrás por un perro o un lobo.

En otro orden de cosas, los perros/lobos tienen un lenguaje corporal que les indica si la actitud es de ataque, de sumisión, de defensa, de escapada, etc.

Si te fijas, cuando dos perros/lobos se están retando se miran fijamente a los ojos, tienen las orejas "erguidas" (si son perros de orejas colgantes las echan un poco hacia adelante), enseñan los dientes en mayor o menor medida (esto indica si es miedo o seguridad, pero en ambos casos puede venir una mordida), el rabo está en una postura alta (denota superioridad), etc.

Si dos perros/lobos se quieren conocer no suelen acercarse directamente (aunque lo parezca) siguen una trayectoria un tanto oblicua, o dando un leve rodeo. Si van en línea recta y mirando fijamente al otro se considera que es una actitud es altamente amenazante.

Podría extenderme mucho más, pero creo que con esto ya hay una idea general bastante buena.


¿POR QUÉ TE PERSIGUEN?
Pues bien, sabiendo lo anterior, piensa en la última vez que te persiguió un perro por el campo.

Seguramente fuera algo así:
Tu vas tan contento con tu bici, a buen ritmo y de repente se te abalanza un "puñetero" perro, junto con varios "amiguetes" que te ladran con una mala leche impresionante y que te persiguen un buen rato hasta que te alejas.

Llegas a tu casa, te conectas al foro de ciclismo y te acuerdas de todos los perros, de todos los dueños de perros, de que el campo debería estar vallado (amigo, para eso te quedas en la ciudad y te das un paseo por el parque), y bla bla bla bla.

Haces hincapié en la necesidad de que haya impuestos por tener perro, de que deberían tener seguro y matrícula (curiosa comparación, ¿os suena de algo a los de Sevilla? ), que hay que denunciar al dueño porque el campo es de todos (otro error bastante grande en el que no quiero entrar), y que los del campo lo único que quieren es jorobar a los que vamos en bici y nos achuchan a los perros (otra majadería que he leído en una ocasión).


Ahora voy a escribir como si fuera un perro, en plan de broma. El proceso mental del perro es parecido al aquí descrito:

-¡Que bien!, estoy tan tranquilo, cuidando el ganado de mi dueño, su cortijo (o una simple parcela), sentado en la sombra de un árbol viendo las ovejas, corderos, cabritillos. ¡Qué bonito día!

-Parece ser que hoy es un día tranquilo. Los miembros de mi manada humana no están por aquí, debe ser eso que ellos llaman fin de semana. ¡Qué suerte!, hoy no voy a tener que correr mucho detrás del ganado, lo voy a dejar por aquí cerquita de la majada, que hay sombra y agua. Así descanso un poco que llevo muchos días corriendo de un lado a otro.

-¡Espera! ¿qué es eso? ¡Maldita sea! Un tipejo viene subido en un bicho que corre como un diablo directo a mi territorio, tendré que estar atento. Desde luego mala pata la mía. Ese tipejo, no viene hacia mi territorio, viene hacia mi dominio. Me voy a levantar y voy a pegar unos ladridos a ver si se va. ¡Guau! [pausa] ¡Guau! [pausa] ¡Guau!. Espero que haya entendido mis ladridos de aviso y se vaya.

-¡Hay que ver qué mala suerte! Ese individuo no solo viene hacia mi, sino que ha hecho caso omiso de mi advertencia, sigue viniendo y se acerca peligrosamente a mi dominio.

-Lo he intentado, pero él se lo ha buscado, voy a por él le voy a formar un follón de aupa, espero no tener que morderle, pero él tiene que creer que sí, mi intervención tiene que ser decidida, pero sobre todo convincente, tengo que llevarlo en dirección hacia el exterior del territorio, que se aleje del dominio mio actual o del ganadado/casa de mis amos, es decir, hacia esa tierra de ahí, que parece que es tierra de nadie.

[aquí es cuando te monta el follón al lado de tu bici y tu estás a punto de matarte, no por una mordida de perro, sino por una posible caída de la bici. Si en lugar de un perro hay varios, el líder de la manada será el que más se acerque a la bici. Imagina todo tipo de ladridos y bufidos].

-¡Buf!, se ha ido. Misión cumplida. He hecho aquello para lo que nací, he echado a un intruso y he defendido el ganado. Para que luego mi dueño diga que no me he ganado la comida de hoy.

-Por cierto, me ha gustado eso de que se vaya asustado, creo que la estrategia que he seguido ha sido correcta, la próxima vez la repetiré.


Desde mi punto de vista hay una serie de claves que debemos entender en este comportamiento concreto del perro:

-El perro hace su trabajo, lo que su genética le dice.
-El ciclista huye, reforzando la actitud del animal a volver a actuar de la misma manera en una situación igual.
-Si los ciclistas nunca hubieran huido y el animal hubiera visto que tal como llegaban se iban sin hacer caso al ganado, sin acercarse a la casa, el comportamiento de perseguir al ciclista se hubiese extinguido por sí mismo.


¿CÓMO SE DEBE ACTUAR?
Todo lo anterior está muy bien, pero ¿qué tengo que hacer en realidad cuando veo a un "perrazo" venir, a veces acompañado de más perros, como una bala hacia mi?

Voy a tratar de explicar lo que puedes hacer y lo que no debes hacer pero no lo que tienes que hacer, eso lo decides tú . Recuerda que todo perro, por docil que sea, incluso el más pequeño "caniche" puede morder, solo se trata de proporcionarle el estímulo adecuado para desencadenar un ataque. Dicho lo anterior, normalmente los perros tienden a no atacar y si creen que tienen que hacerlo tienden a avisar de una forma no contundente, es decir un bocado pequeño, sobre esto ya comento algo más al final de la entrada.

El perro suele avisar antes de arrancar corriendo hacia ti. El aviso es el ladrido (se oye claramente desde lejos). Si tienes la mala suerte de que el ganado/casa que vigila el perro esté muy cerca del camino por el que transitas es posible que la fase de aviso sea muy corta, así que ladrará un par de veces y saldrá disparado hacia ti. Así que cuando vayas por un camino trata de saber anticipadamente cuáles pueden ser los puntos conflictivos (cerca de casas, de establos, majadas, etc).

Si un perro quiere interceptarte, ten por seguro que lo hará. Hay razas que no son especialmente rápidas (mastines) pero, por ejemplo, los pastores alemanes pueden correr a una velocidad considerable (25 Km/h) durante bastante tiempo sin cansarse excesivamente.

La velocidad a la que te acercas es crucial para que el perro lo sienta como amenaza. Cuanto mayor sea la velocidad más amenaza percibe. Quiero decir que, en teoría, si cuando oyes el ladrido aminoras la marcha ( 10 Km/h o menos ) es posible que el perro no se acerque, o si lo hace no muerda. Lo más seguro es que tengas que aguantar el "temporal" un rato, el perro se acercará mucho a la bici (un palmo de distancia de separación como mucho), irá hacia los pedales, pero seguramente no muerda. Aguanta y sigue tu camino tranquilamente. Llegará un momento en el que pare, siga ladrando y te deje ir.

Si cuando ves el perro crees que la opción buena es correr, hazlo. Pero piensa en una cosa: si el perro te alcanza, te vas a poner muy nervioso, puedes caerte de la bici. Seguramente tienes más posibilidades de tener un traumatismo por caída de bici huyendo de un perro que las probabilidades de que dicho perro te muerda. Tu eliges si correr, asumiendo el riesgo de caída, o aminorar la marcha y aguantar estoicamente hasta que decida irse. El riesgo de mordedura, pienso yo que es el mismo, la diferencia es la velocidad que lleves cuando te muerda (si lo hace) y la velocidad a la que te caes de la bici tu solo o por la mordida.
Si es un grupo de perros, lo normal es que el líder sea el primero, los demás darán el follón detrás del líder.

Debes saber que cuando los perros van a atacar o defenderse suben los labios y se hacen muy visibles sus dientes.
Si los perros te oyen gritar y ven tus dientes (gritándoles ¡fuera! por ejemplo) pueden interpretar que tu les vas a atacar a ellos de forma inminente, provocando su ataque. Así que, nada de gritos y a hablar con calma, no sonrías al perro para tratar de calmarlo ya que le enseñas los dientes.

No debes mantener la mirada fija en el perro. Eso es un reto. Desvía la mirada todo lo que puedas, pero no le pierdas la posición míralo con el rabillo del ojo de vez en cuando. Si le das el lado o la espalda la probabilidad de ataque es mínima porque no estás en posición desde la que tu puedas iniciar un ataque contra él. Piensa si estás cómodo de espaldas al animal, personalmente puedo asegurarte que se pasa mal, pero no he tenido problemas.

Un perro asustadizo es peor que uno seguro de sí mismo. Es más fácil que un perro asustadizo muerda que uno seguro de sí mismo. Cualquier gesto erróneo (levantar un brazo, un movimiento brusco) puede arrancar la mordida. Siempre procura hacer movimientos suaves.
Cuando vas en grupo debes evitar dar gritos para avisar a los demás de que has visto perros. Los gritos los interpretan como ladridos.

Cuando se realiza una ruta en grupo es bueno hablar primero sobre cómo actuar en caso de encontrarse con perros. Las opciones básicamente son correr "como cobardes" o hacer piña. Una u otra opción depende mucho de la experiencia y edad de los integrantes del grupo. Si se hace grupo los ciclistas más experimentados deben ir en la zona exterior del grupo y los menos experimentados en el centro y a la mínima velocidad posible. En mi opinión la de hacer un grupo compacto es más adecuada.

Si en el grupo hay niños por fuerza hay que hacer una piña y desmontar de las bicis. Los niños seguro que acaban cayéndose tarde o temprano, sin importar la velocidad. Lo dicho, todos desmontáis, los niños al centro, los adultos en el exterior y las bicis de los adultos se situarán entre los perros y el grupo.

Esto lo digo porque los niños tienden a mirar (por miedo) fijamente a los perros, lo que interpretarán como un reto, pueden gritar por el susto, lo que nuevamente se interpretará como un reto, pueden hacer un movimiento brusco como levantar un brazo o correr repentinamente. Todo eso lo interpretarán como amenazas, son perros, es su lenguaje. Así que por favor, no hagáis correr a los niños.

Si te gusta salir en bici con tu perro, ten por seguro que el objeto de ataque será tu perro. Puede ser que a ti no te ataquen, pero ten por seguro que al perro sí, sobre todo si tu perro quiere "defenderte", cosa bastante probable. En este caso tienes que bajarte de la bici (si no, la caída es segura), poner tu perro en el lado opuesto del perro "pastor", la bici entre el perro "pastor" y tú, y ahora, armarte de valor y paciencia e irte despacito. Lo suyo es NO llevar suelto a tu perro, sino con dispositivos adaptados para engancharlo a las bicis. Cuando estés en una zona en la que no hay perros puedes soltarlo un poco si quieres, aunque se suele conformar con ir a tu lado.

MUY IMPORTANTE:
No se puede humanizar a un animal. Actuará según sus instintos. Y si te muerde no lo hace porque te tenga manía ni porque el dueño lo entrene para morder ciclistas o senderistas, sino porque te ve como una amenaza. Procura que no te vea como una amenaza.

Hay dos tipos de mordeduras: El primer tipo se corresponde con la "marca". Una marca duele, puedes sangrar algo, pero su objetivo no es destrozarte, es informarte de que, como no te vayas va a ser peor. El otro tipo es la mordedura. Ahí hay una gran presión y un desgarro. En la presión te pueden partir un hueso del brazo y en el desgarro podrían arrancarte un pedazo de carne. Esa mordedura es prácticamente improbable que se de. Pero si se da tendrá feas consecuencias para ti. Así que si un perro te marca, creo que lo suyo es aguantarse y no responderle. No hagas nada que pueda hacer que acabe en el otro tipo de mordedura.

La probabilidad de un ataque serio de un perro es muy muy pero que muy remota. Pero si te tienes que defender hazlo vehementemente. Los puntos débiles del perro son los ojos, el hocico, el vientre, las ingles y las extremidades. Dale todo lo fuerte que puedas. Intenta meterle tus dedos en los ojos, pegarle fuerte en el hocico, patearle el vientre, partirle una pata, lo que sea, si la cosa ha llegado a mayores no vas a tener más remedio que hacerlo.

Fuente: Bici y más

11 comentarios:

  1. Buenísimo el artículo. Gracias
    Natur

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  2. Interesantisimo artículo.
    ACr

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  3. si señor a ver si asi aprendemos a no "salir por patas" cuando pasemos por su territorio.
    Es bueno no motrarse asustado, es decir seguir con la ruta tranquilamente( se que cuesta, pero se debe intentar), el perro lo que quiere es que te vayas de su casa. Si muestras movimientos extraños( cambios de ritmo, amenazas....), lo toman como una amenaza y es mas facil que intente morder. Eso si, sangre fria y respiracion tranquila, pero funciona muy bien.
    Si notas amenaza real( no que salga corriendo a tu lado y te ladre en el tobillo......), lo que mejor funciona es darle un buen chorreon de agua, les suele espantar....

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  4. Muy bueno tu artículo.
    Yo pues si el perro me ladra le echo la cibi encima y salen corriendo despavoridos. Si el perro me sorprende por un lado. (y no de frente), desmonto de la bici y la pongo entre el perro y yo mientras camino y le alejo.
    Cuando son varios perro le aviento la bici al lider y escapo sprinteando.

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  5. Yo tengo derecho a pasar por un camino sin que me muerdan. Acaso si pada el perro por mi puerta le pego un barazo?



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    1. Sería práctico llevar un bastón o cachiporra telescópica y darles en el lomo. Otra alternativa gas pimienta o aerosol de laca acrílica en los ojos.

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  6. Muy bonito e incluso comprensible dado el instinto genético del animal, el relato del perro que ladra cuando el ciclista se acerca a una finca en la que habiendo un perro que temiendo que el posible intruso amenace la propiedad que defiende, comience a ladrar e incluso a perseguir y amenazar al ciclista.
    Pero mi caso es aún más complicado. Ciudad de Madrid, parque público donde puede haber todo tipo de personas e incluso un carril bici.
    Un ciclista paseando tranquilamente sobre su bici, una fría mañana de domingo a primera hora. De repente, por detrás y su derecha le sale un perro SUELTO ladrando y persiguiendole. Muy a lo lejos el ciclista escucha la voz del que parece ser el dueño del perro porque le llama por su nombre, pero el perro haciendo caso omiso de la llamada continúa persiguiendo al ciclista. Y esto ocurre durante bastante tiempo en que el perro amenaza cambiando de lado alternativamente, por la derecha, por la izquierda...Por supuesto, el dueño no llega para sujetar al perro. Es el propio animal el que desiste de la persecución.
    Pasado el peligro, el ciclista busca un lugar para calmar su miedo, sus nervios, taquicardia extrema..., etc
    Comprueba que el dueño del perro ha llegado al lado del animal, y ni le amonesta, ni le pone correa para que no vuelva a pasar lo mismo con otra persona.
    Llama a la policia para denunciar el caso. La contestación que recibe, es descorazonadora: "lo sentimos, pero no tenemos efectivos para este servicio..".

    El ciclista del que hablo es mi hijo. Puedo asegurar que el trauma que le ha ocasionado ha sido tan fuerte, que ha necesitado asistemcia médica.
    Me gustaria recibir algún comentario tanto por los amantes de los perros, como por los que les tienen S"respeto"
    Gracias a todos de antemano

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  7. Hoy me ataco por la espalda sin ladrar, casi alcanza a morderme solo me lastime las manos al caer, que hacer en este caso.


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  8. Tiene que volver la perrera perro que hay en la calle yo salgo a las 4:30 de la mañana y muchas veces me quisieron morder dos negros pillbor y me defendi a las patadas ahora uso otra estrategia que me da buen resultado cuando ando en la bicicleta y veo los perros en vez de acelerar voy muy despacio y me miran y no me hacen nada
    Bueno de lunes a viernes me tengo que cuidar de los perros y de los chorros!!!

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  9. Hoy descubrí algo que me hace sentido. Un perro bravo, me dejó pasar hasta su amo, yo atento de su actitud igualmente.Luego observó los pedales de mi bicicleta y empezó a gruñir... creo que los reflectantes típicos de pedal los confundió con los ojos de algún animal y eso lo provocó.

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  10. mascotaslapituca.es
    Los perros ladran a las bicicletas por instinto territorial o curiosidad. Comprender su comportamiento es esencial. Con paciencia y entrenamiento positivo, podemos reducir estos ladridos, promoviendo una convivencia armoniosa.

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