31 de enero de 2015

Con 16 tréboles por banda…



Ruta: Sierra de Rena
Fecha: 01 de febrero de 2015
Distancia: 44 Kms.


viento en popa a toda vela, no corta el camino, sino vuelan, los tréboles hasta el fin.
Perdonad la licencia, pero lo mío no es la literatura, aunque viento hemos tenido para repartir.


Se presentaba el día frío y ventoso. Me dispongo a acercarme hasta el punto de reunión cuando me cruzo con dos componentes que hacían ruta alternativa, ‘El Papa’ y ‘Paquete’, enfundados hasta la coronilla como es de rigor hoy. En la estación de Renfe espera el grueso del grupo.


Partimos por la Vía Verde hacia Rena. La bajada asfaltada hacia el puente del río, a la altura de Cerezo, cada día tiene los baches más profundos y en más cantidad. No sabemos si el agua acumulada en ellos es por las lluvias de días anteriores o porque han alcanzado la profundidad de las aguas subterráneas.


Llegamos a Rena cuando los vendedores del mercadillo todavía están preparando las ofertas del día (¡Marííaaaa...3 bragas, 5 ‘Leuros’), por lo que no nos paramos y cruzamos el pueblo hacia la primera dificultad del día.


Saltamos la valla y empiezan las miradas de unos hacia otros para ver quien se aventura a subir la sierra. Valientes, dos, ‘Sedas’ y ’16 Válvulas’, a veces montados, a veces a pie. Los demás a izquierdas para bordear la sierra hasta el vallado que nos corta el camino y donde esperamos a que bajen los valientes. Rato corto porque no vemos ni divisamos a los osados, por tanto, bajamos el grupo para esperarlos en el camino.

Una vez en el camino intentamos adivinar los 2 puntitos en la lejanía bajando el empinado cortafuegos. Mientras hablamos de posibles avances tecnológicos a poner en práctica en las rutas. Que si un ‘palo de esos’ para hacer selfies con el móvil, que si un dron para tomas fotos aéreas de las rutas, etc. Me da a mí que estas cosas no las vamos a encontrar en el mercadillo de Rena.

Ya todos juntos seguimos hasta la población de Villar de Rena rodeando la sierra. Parada para picar mientras hablamos de los negocios de nuestro compañero José ‘Apedales’. Foto(s) de rigor y pa’lante.

Todavía con las barritas en la boca salimos del pueblo y comenzamos la segunda subida del día. El grupo se estira y tomo la cabeza antes de llegar arriba. Otra cosa es el descenso. Recuerdo hace 2 años cuando organizaron la Ruta del Frutal en Flor en Valdivia que esa misma bajada era como ir por medio de un río haciendo rafting de la cantidad de agua que bajaba por las lluvias.


Vuelta ya para Villanueva. Ahora sí que está el mercadillo funcionando. Indico a mis compañeros que a la altura de la vieja estación de tren de Rena alargaré mi ruta hasta Valdivia y Entrerríos, puesto que la hora lo permite. Hacemos  un grupo de unos 6 o 7 tréboles, los cuales nos encontraremos casi todo el resto de la ruta con un gran aire en contra. El resto deshacen el camino de la Vía Verde y vuelven hacia Villanueva.


Llegados a Villanueva, cada uno para su casa y a esperar al próximo domingo donde echaremos otra mano más a nuestra vecina Pilar.

Espero que no faltéis. Gracias anticipadas.

Cronista: Carlos (Induráin)

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