Vía Verde: Tramo Madrigalejo-Logrosán y vuelta.

Fecha: 20/Junio/2.010
Distancia: 59.5 Kms.
Crónica de la Ruta

Comenzamos el día más temprano de lo habitual. Con los coches preparados a las 8:30´recuerdo que no llevo el carné de conducir, así que me vuelvo a casa para recogerlo; gracias a eso veo que también me había dejado la bolsa con la comida, los guantes y el líquido para la ruta, menos mal.

Así que emprendimos el viaje en coche desde Villanueva a Madrigalejo. Una vez en la estación bajamos las bicicletas, las montamos y nos disponemos a enfilar la vía verde hasta Logrosán. Ya hacía calor cuando comenzamos hacia las 9:30 y un ligero aire que en algunos momentos se hizo más pesado.

Nada más empezar una oveja descarriada se coloca delante nuestra, oveja preñada decíamos. Así que como tenemos experiencia en correr detrás de las ovejas, empezamos a apretar el paso con Jose Carlos delante, y nosotros dos detrás (Antonio y Jose), hasta que la cerca se abría en un paso bajo, y la oveja se coló por ella. Mientras tanto, Jose nos iba comentando los diferentes pasos de la vía (Canal de las Dehesas, pedruscos que se habían desprendido...) y hablando de los compañeros que no nos acompañan y las razones especulativas que pensamos les llevan a quedarse en casa -seguro que más a gusto que nosotros en esos momentos-.

Ya cerca de Logrosán se nos une un ciclista descarriado, que acompañará a Jose hasta el final, mientras Jose Carlos y yo vamos descubriendo la sierra de las Villuercas. Por fin alcanzamos la estación de Logrosán y ahí paramos a beber y avituallarnos, mientras departimos con el nuevo miembro ocasional, minero prejubilado de los Picos de Europa nos comentaba y paisano extremeño que se deja caer por aqui de vez en cuando.

Terminado el receso subimos un repecho para llegar hasta el centro de Logrosán. Nos hacemos unas fotos, pero al poco tenemos que parar. Mi burra chirría como un guarro antes de matarle: el freno roza con la rueda, y Jose (el manitas del grupo, gracias a él nos había cualquier problema), lo arregla para que no chirríe. Por un tramo de carretera bajamos la cuesta empinada y ahí alcanzamos la Vía Verde.

Desde aquí tocamos tambores de guerra: "mariquita el último" e iniciamos el regreso de 29 kms. a todo trapo, sin cuartel... la media no sé cual sería lo que sí sé es que corríamos como demonios.

Ya en Madrigalejo llegamos con la sensación de habernos quitado la espina de completar la vía verde, así que en esas estábamos pensando en la nueva ruta del próximo domingo, que será El Balneario-Ermita de La Antigua. Agur, correliebres!!!